Advierte Erdogan a golpistas: Pagarán cara su traición

El presidente de Turquía, Recep Tayip Erdogan, rechazó dejar la presidencia y prometió que todo volvería a la normalidad, luego del fallido golpe militar.

Calificó el intento de golpe de Estado como un regalo de dios que permitirá limpiar el Ejército.

"Este levantamiento, este movimiento es un gran regalo de dios para nosotros. Porque el Ejército será limpiado y ningún traidor podrá quedarse", afirmó el mandatario en rueda de prensa al poco de aterrizar en Estambul, asegurando que los golpistas pagarán cara su "traición".

"Estoy pidiendo a todos los militares, que son nuestros hijos, no podemos aceptar que usen sus armas contra sus padres hermano e hijos. Si apuntan esas armas contra esa gente el sistema judicial actuará".

Subrayó que no entregaría el país a los militares, "nunca nos daremos por vencidos, todo volverá a la normalidad".

RESPONSABILIZA A SEGUIDORES DEL IMÁN GÜLEN

El presidente turco denunció "una traición" de soldados golpistas a los que acusó de estar vinculados a su enemigo jurado Fethullah Gülen, un imán exiliado desde hace años en Estados Unidos.

En el aeropuerto Atatürk de Estambul, Erdogan fue recibido por una muchedumbre y afirmó que el hotel en el que se encontraba de vacaciones, en Marmaris, una ciudad costera del sudoeste de Turquía, fue bombardeado después de su partida.